La vida en un feudo [Actualizado]


Los alumnos de 2º A y 2º C del IES Mediterráneo de Estepona, con gran creatividad, han elaborado  unas maquetas en las que han representado los diferentes espacios que componen un feudo, valiéndose de cartón, tijeras o papel de diferentes colores. Podemos reconocer el majestuoso castillo, situado sobre una gran colina, como gran centro de poder y residencia del noble. En la campiña, las tierras más fértiles constituyen la reserva señorial, que trabajan los siervos para el disfrute del señor. Al otro lado del río, cruzando el puente, las modestas casas de madera  que conforman la aldea. En los mansos, el laboreo de sol a sol de los siervos de la gleba, para poder alimentar con sopas y pan negro a sus cinco hijos, pero también para pagar anualmente el oneroso diezmo a la Iglesia. Las tierras comunales podían ser explotadas en sus orígenes por todos los vecinos, pero  el señor, haciendo valer su fuerza, se ha apropiado del terreno para poder disponer de leña y practicar la mayor de sus aficiones, la caza.

Como podéis comprobar, mil historias se nos han  ocurrido  en torno a este feudo. Para reconocer la desigualdad existente dentro de la sociedad feudal y generar situaciones de empatía con el campesinado, los alumnos han redactado, de manera paralela al proyecto de la maqueta, un texto creativo en el que han contado situaciones verosímiles dentro de la realidad de este estamento no privilegiado: El pago de las rentas al señor, los ataques de los vikingos, el servicio de corvea...